La ola
ni bien llega se está yendo.
Existe la ola. He aquí, ella llega y se va.
Manifiesta el vaivén de ese montón de agua que es el mar.
Nunca ha cambiado nada, han venido infinidad de olas y otras tantas están por llegar.
Ese movimiento cambiante es lo constante.
La paradoja de lo que se mueve en aquello que permanece.
No hay comentarios:
Publicar un comentario